El invierno ya está aquí, parece que con las fiestas navideñas no somos conscientes o pasa más desapercibido, pero seguramente ya habréis notado días de temperaturas más frías de las habituales, así que hoy me siento para hablaros de algunas recomendaciones a la hora de adaptar la casa a la llegada del invierno, pero sobre todo, las habitaciones de los niños, con especial atención, cuando hay un bebé en el hogar.
Y es que nuestros pequeños están más expuestos a la hora de contraer enfermedades, especialmente los recién nacidos, por ello, toda precaución es poca a la hora de mantener un ambiente acogedor y confortable en casa.
Controlar la temperatura ambiente del dormitorio es fundamental. Según los profesionales médicos, la habitación nunca debe estar a una temperatura superiora los 24ºC, pero ademas es importante generar una temperatura ambiente confortable en toda la casa, para que el bebé no acuse cambios fuertes cuando se mueva por ella.
La calefacción juega un uso muy importante para alcanzar esa temperatura ideal. ¡Pero ojo con esto! Ya que no debemos abusar de ella debido a que reseca mucho el ambiente y puede ser perjudicial para nuestro bebé. El llamado «calor azul» es para mí la mejor opción para carlentar la habitación de nuestros pequeños. Se trata de un radiador con un fluido especial que calienta la habitación uniformemente y sin notar nada de movimiento de aire, aunque supera en precio a otras opciones de calefacción, su consumo hace que resulte económico a lo largo del tiempo.
El papel de los humidificadores es fundamental para acondicionar y controlar la humedad en la habitación de nuestros pequeños, ya que ayudan a eliminar el aire seco que irrita e inflama los conductos en la nariz y la garganta.
Actualmente el mercado cuenta con una amplia variedad de humidificadores. En mi caso opté por fiarme de una marca de confianza como Miniland para un producto que sabia que amortizaría con el paso del tiempo.
Además la marca cuenta con una amplia gama, entre los cuales me decanté por el modelo «Humiessence» por encontrado como el más completo de todos ellos:
Emite vapor frío y tiene una autonomía superior a 10 horas, además es adecuado para habitaciones de hasta 30 m² de superficie y tiene una capacidad de 2,5 litros de agua. Es un humidificador de esencias intuitivo que permite seleccionar el aroma que difunde con una boquilla orientable que reparte el vapor equitativamente por toda la estancia. Además cuenta con una luz de compañía de color azul que crear una atmósfera agradable y que se puede activar y desactivar. Tiene un sistema que detecta la falta de agua y se detiene automáticamente, ¡y muy importante! Es de pequeño tamaño y su diseño me encanta.
Mi experiencia es totalmente positiva con el producto, así que os dejo el enlace a sus puntos de venta por si estáis interesados en adquirirlo.
Otro aspecto a destacar es la ventilación de la casa para regular la climatización de la vivienda. Debemos dedicar unos 10-15 minutos a ello al día, para eliminar ácaros, malos olores y renovar el aire de las habitaciones.
La vestimenta tanto del bebé, como de la ropa de la cuna también son importantes. Encontraréis una amplia variedad que van desde las sábanas de algodón con tejidos más calentitos para el frío invierno, nórdicos, sacos de dormir… En nuestro caso lo que mejor nos ha funcionado son los sobrepijamas como el de la foto , ya que Daniel es un terremoto, también durmiendo, y no para de moverse y desarroparse en la noche. Kiabi, C&A y H&M son especialistas en ofrecernos estos productos a un precio/calidad realmente competitivo.
Estos fáciles consejos te ayudará a disfrutar del invierno con tu peque, pero además si queréis conocer otros trucos, os dejo el enlace para que os podáis descargar una guía que ha hecho Miniland, que me resulta especialmente práctica y recomendable.
By Esther Salamanca ❤️